Preguntas frecuentes

Bombillas

Los diodos emisores de luz (LED, por sus siglas en inglés), son pequeños diodos que están incluidos en las lámparas LED y encajan fácilmente en un circuito eléctrico. Pero, a diferencia de las bombillas incandescentes, no tienen un filamento que se queme ni tampoco se calientan demasiado. Se iluminan únicamente a causa del movimiento de electrones en un material semiconductor y duran tanto como un transistor estándar.
Las bombillas LED son la iluminación del futuro y con cada año que transcurre se vuelven cada vez más eficaces y siguen manteniendo su buena calidad. Actualmente, las bombillas LED son unos 85 % más eficientes en términos de consumo de energía en comparación con las bombillas incandescentes, ya que emiten menos calor y tiene una vida útil sumamente prolongada. La mayor parte de la energía que emiten las bombillas incandescentes se convierte en calor en lugar de luz, lo que disminuye significativamente su índice de eficacia.
Si bien las bombillas LFC (luz fluorescente compacta) han hecho un gran progreso con el correr de los años, aún tienen la desventaja de dañar el medio ambiente dado que contienen materiales peligrosos como el mercurio; por lo tanto, deben desecharse correctamente. 
Las bombillas LED no contienen mercurio ni emiten rayos UV perjudiciales. Además, son unos 50 % más eficaces en términos de consumo de energía en comparación con las bombillas de bajo consumo (LFC) y son luces de encendido instantáneo que se atenúan sin titileo. 

En lugar de ir a la tienda y tomar una bombilla incandescente del estante, ahora dispone de varias opciones de compra de bombillas:

  • LED: Es la opción más eficaz, ya que las bombillas LED son unos 75-80 % más eficaces en términos de consumo de energía en comparación con las bombillas incandescentes tradicionales y duran 25 veces más.

  • Bombillas incandescentes ahorradoras (halógenas): Estas bombillas incandescentes de menor vataje tienen un filamento de tungsteno al igual que las bombillas estándar, pero están rodeadas de un gas halógeno, en vez de argón o nitrógeno, para proporcionar una luz brillante con un mejor rendimiento energético. Son unos 25 % más eficaces en términos de consumo de energía en comparación con las bombillas incandescentes tradicionales y durarán tres veces más.

  • Luces fluorescentes compactas (LFC, bajo consumo): Aunque las primeras versiones de las LFC solían ofrecer una luz penetrante, las bombillas nuevas tienen más opciones cromáticas y fueron diseñadas para lucir como bombillas incandescentes tradicionales. Estas bombillas ofrecen un 75 % de ahorro energético frente a una bombilla incandescente y duran diez veces más.

Todas estas bombillas costarán más que una bombilla incandescente tradicional (las bombillas incandescentes halógenas son la opción más económica y las LED, la más costosa) pero el ahorro energético se contabilizará con el tiempo. El Departamento de Energía de los EE. UU. calcula que ahorrará $6 al año por cada bombilla incandescente que actualice a LFC, y el ahorro crecerá con el tiempo, ya que estas bombillas duran mucho más y no requerirán un reemplazo tan frecuente como lo requieren las bombillas incandescentes estándar. Si reemplaza 15 bombillas en su casa, puede garantizar que ahorrará $50 en costos energéticos cada año y, además, no tendrá que comprar bombillas con la misma frecuencia.

 

Si la bombilla que adquiere cuenta con el certificado de Energy Star (que significa que es sometida a pruebas para cumplir con normas específicas de eficacia en términos de consumo de energía), ahorrará más, aunque también gastará más anticipadamente. Si desea saber con exactitud cuánto le costará una bombilla, la etiqueta del paquete debe explicarle cuánto le costará usarla durante un año y también cuánto durará.

Si pretende reemplazar bombillas específicas en su hogar, probablemente esté acostumbrado a adquirir una bombilla de 60 vatios, 100 vatios o similar; pero el vataje está relacionado con la cantidad de energía que la bombilla consume y, por lo tanto, no es un modo preciso de indicar cuánta luz produce la bombilla.

En cambio, debe observar los “lúmenes”, que es la medida que indica cuánta luz la bombilla produce. A continuación se incluyen algunas pautas para entender los lúmenes:

 

  • Si usa una bombilla de 100 vatios, busque una bombilla con 1600 lúmenes.

  • Si usa una bombilla de 75 vatios, busque una bombilla con 1100 lúmenes.

  • Si usa una bombilla de 60 vatios, busque una bombilla con 800 lúmenes.

  • Si usa una bombilla de 40 vatios, busque una bombilla con 450 lúmenes.

 

Otra nueva opción que advertirá es la temperatura de color. Dado que a muy pocas personas les agrada la fuerte intensidad de las luces fluorescentes, la mayoría de las bombillas de bajo consumo (LFC) ahora presentan colores diseñados para imitar la calidez de una bombilla incandescente. El color se mide en kelvins, que oscilan entre 2700 K (la luz cálida de una bombilla incandescente típica) hasta aproximadamente 5500 K (tono diurno o natural). Si bien todas estas bombillas generan una luz blanca, las luces más cálidas tendrán un tono más amarillo (mejores para los dormitorios y otras condiciones de iluminación suave), mientras que las luces más frías tendrán un tono azul (mejores para leer). Se recomienda comprobar el paquete para ver qué tipo de luz genera la bombilla antes de comprarla, y, si no está seguro, la ferretería de su zona debe tener un cartel que muestre los diferentes colores.

Los puntos A y C que figuran abajo son las etiquetas “Lighting Facts” (Datos de iluminación), que puede encontrar en los paneles delantero y lateral del paquete. La luminosidad en lúmenes y el costo energético aproximado por año figuran en la parte delantera, mientras que la etiqueta “Lighting Facts” del panel lateral incluye más detalles sobre la vida útil, la apariencia de la luz (también conocida como la temperatura de color) y la energía consumida. En algunos paquetes, también encontrará el punto B, que muestra la temperatura de color de la bombilla.

Las luces compactas fluorescentes tienen en su interior una pequeña cantidad de mercurio. En el uso estándar, el mercurio permanece dentro de la bombilla y no existen riesgos. No obstante, si rompe una bombilla, se recomienda tener cuidado al limpiarla. Pero no se alarme demasiado: de acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental (EPA), las bombillas de bajo consumo (LFC) contienen una cantidad de mercurio muy pequeña (inferior a un céntimo de la cantidad en un termómetro de mercurio). Cuando la bombilla se queme, debe reciclarla para evitar que el mercurio acabe en un vertedero. La ciudad donde vive o el proveedor de recolección de residuos pueden ofrecer servicios de reciclaje, pero muchos comerciantes minoristas importantes aceptan las bombillas LFC para el reciclaje. Tanto Home Depot como Lowes, IKEA, Ace Hardware y True Value reciclarán bombillas. Cuando compre la bombillas consulte con el vendedor minorista los pasos que debe seguir.

PILAS

No mezcle distintos tipos de pilas, pilas de distintas capacidades ni de distintas composiciones químicas en un mismo dispositivo. Si trata de mezclar pilas usadas puede aumentar considerablemente el riesgo de pérdidas y de daños al dispositivo. Use siempre el mismo tipo de pilas en un dispositivo para obtener un desempeño estable tanto del dispositivo como de las pilas.
Si va a guardar un dispositivo durante un tiempo prolongado (meses o más), quítele las pilas.
Las pilas alcalinas que se guardan a “temperatura ambiente” se descargan menos de un 2 % por año. Si se guardan a 29 ºC (85 ºF), pierden alrededor de un 5 %, y a 38 ºC (100 ºF), alrededor de un 25 % por año. En otras palabras, las pilas deben guardarse en un lugar fresco y seco. No es necesario guardarlas en el refrigerador. Las pilas deben guardarse en su embalaje original hasta que usted esté listo para usarlas y deben colocarse lejos de objetos metálicos que puedan ponerlas en cortocircuito.
Las pilas alcalinas y las de zinc-carbono (de larga duración) pueden desecharse sin problemas con la basura doméstica normal. Es importante no desechar grandes cantidades de pilas juntas. Algunas comunidades ofrecen reciclaje o recolección de pilas. Para obtener esta información, los consumidores deben comunicarse con su municipalidad local. Las pilas recargables, las de litio, las alcalinas con contenido de mercurio, las de óxido de plata con contenido de mercurio y las de zinc-aire se deben reciclar. Para averiguar dónde reciclar las pilas recargables, consulte www.call2recycle.org (para los EE. UU.). Si vive en Canadá, consulte www.call2recycle.ca.
Si no está totalmente satisfecho con la compra de su pila, le reembolsaremos la totalidad de su importe. La garantía no cubre el uso indebido de las pilas. Si un dispositivo sufre daños por habérselo usado con nuestras pilas, llame al Servicio de atención al cliente al número gratuito 1-877-383-6399. Nuestros agentes evaluarán su reclamo y volverán a contactarlo para comunicarle nuestra resolución.

Pilas de larga duración

Las pilas de larga duración son un tipo de pila de zinc-carbono que puede usarse en una variedad de aplicaciones de bajo consumo, como controles remotos, relojes, linternas, radios portátiles y detectores de humo (9 V). Se caracterizan por ser de bajo costo y tener un rendimiento aceptable para numerosas aplicaciones.
El tiempo de funcionamiento de una pila de larga duración depende en gran medida del consumo de energía del dispositivo en el cual se la usará. Por eso, es muy importante usar la pila en el dispositivo recomendado para su composición química. El uso de pilas de larga duración es recomendable únicamente con dispositivos de consumo bajo a medio. Para obtener más información sobre cómo seleccionar el dispositivo correcto para su pila, consulte la guía de selección de dispositivos del menú centro de aprendizaje.
En condiciones normales las pilas de larga duración no suelen tener pérdidas. Sin embargo, el riesgo de pérdidas aumenta considerablemente si las pilas se cargan, se mezclan con pilas de distinta composición química o sufren daños físicos y grandes descargas abruptas, lo que sucede cuando se descarga el 80 % de la capacidad máxima de la pila. Si una pila de larga duración tiene pérdidas, se la debe manejar con cuidado y se debe evitar que entre en contacto con los ojos o la piel. En caso de exposición oral, de la piel o de los ojos, o de inhalación de vapores, consulte de inmediato a un médico.
Las pilas de larga duración se usan una sola vez y no deben recargarse. Si intenta recargarlas aumentará considerablemente la probabilidad de pérdidas, incendio o explosión.
Nuestras pilas de larga duración no contienen agregado de mercurio. Es decir que no se agrega mercurio en forma intencional en la fabricación de estos productos, conforme a las normas que establece el ANSI (Instituto Nacional de Normas de los EE. UU.).

Pilas alcalinas

Las pilas alcalinas están hechas de dióxido de manganeso y se usan para una variedad de aplicaciones de alto consumo, como cámaras digitales, juguetes motorizados, linternas de largo alcance y estéreos portátiles. En comparación con las pilas de larga duración, se caracterizan por tener mayor densidad energética, servicio más eficaz, vida útil más prolongada y mayor resistencia a las pérdidas, a un precio relativamente mayor.
El tiempo de funcionamiento de las pilas alcalinas depende en gran medida del consumo de energía del dispositivo en el cual se las usará. Un dispositivo de alto consumo, como una cámara digital, desgasta la pila más rápido que uno de bajo consumo, como un control remoto o una radio portátil. Para obtener más información sobre cómo seleccionar el dispositivo correcto para su pila, consulte la guía de selección de dispositivos del menú centro de aprendizaje.
En condiciones normales, las pilas alcalinas no suelen tener pérdidas. Sin embargo, el riesgo de pérdidas aumenta considerablemente si las pilas se cargan, se mezclan con pilas de distinta composición química o sufren daños físicos y grandes descargas abruptas, lo que sucede cuando se descarga el 80 % de la capacidad máxima de la pila. Si una pila alcalina tiene pérdidas, se la debe manejar con cuidado y se debe evitar que entre en contacto con los ojos o la piel. En caso de exposición oral, de la piel o de los ojos, o de inhalación de vapores, consulte de inmediato a un médico.
Nuestras pilas alcalinas se usan una sola vez y no deben recargarse. Si intenta recargarlas aumentará considerablemente la probabilidad de pérdidas y daños.
Nuestras pilas alcalinas no contienen agregado de mercurio. Es decir que no se agrega mercurio en forma intencional en la fabricación de estos productos, conforme a las normas que establece el ANSI (Instituto Nacional de Normas de los EE. UU.).

Pilas recargables y cargadores

Si las pilas no necesitan cargarse antes de usarse por primera vez, el paquete dirá “Precargadas” o “Listas para usar”. Si no lo dice, la pila necesita cargarse antes de usarse por primera vez.
La capacidad se mide en miliamperios/hora (mAh) y se muestra en el paquete o en la cubierta de las pilas recargables. Cuanto más alto sea el valor en mAh, mayor cantidad de energía eléctrica podrá almacenar la pila. Por ejemplo, si se usa una pila AA de baja capacidad de 800 mAh en una cámara digital, la cámara no funcionará. Para cámaras digitales y otros dispositivos de alto consumo, deberá optar por pilas recargables de alta capacidad.
Al cabo de un año de almacenamiento, nuestras pilas de NiMH precargadas retienen hasta un 80 % de la carga. Normalmente, una pila cargada de forma completa puede guardarse a temperatura ambiente de dos a tres años.
La sobrecarga de las pilas de NiMH puede llegar a reducir su vida útil; estas pilas son sensibles a la sobrecarga continua.
No recomendamos cargar juntas pilas de distinta capacidad. Mezclar pilas de distinta capacidad puede reducir su rendimiento y dañar la pila.
Las pilas de NiMH no tienen efecto memoria, lo que significa que no pierden su máxima capacidad energética si se cargan varias veces después de haberse descargado solo parcialmente.
Las pilas de NiMH pueden recargarse y usarse cientos de veces. Por este motivo, las pilas recargables pueden ser un gran ahorro en comparación con las pilas de un solo uso.
Las pilas recargables pueden reciclarse en cualquier punto de reciclaje de pilas recargables. Para averiguar dónde reciclar las pilas recargables, consulte www.call2recycle.org (para los EE. UU.). Si vive en Canadá, consulte www.call2recycle.ca. También puede llamar al número de teléfono gratuito de Call to Recycle que figura en nuestro paquete de pilas recargables.

 

Si tiene preguntas específicas sobre nuestras pilas, llame a nuestro número gratuito (1-877-383-6399) y nuestros especialistas en pilas se complacerán en ayudarlo.